Una obra heredera del trabajo de Arturo Zabala aborda aspectos inéditos de la ópera en València durante la Guerra Civil y la Posguerra
La Institució Alfons el Magnànim-Centre Valencià d’Estudis i d’Investigació, dependiente del Área de Cultura de la Diputación de Valencia, ha presentado una obra de Ernest Gonzàlez Fabra heredera del trabajo realizado por Arturo Zabala, antiguo director del Magnànim. Crònica de l’òpera representada a València (1936-1959). La Guerra Civil i la Postguerra, propone un recorrido a través de los cambios y oscilaciones que experimentó la ópera en València durante el periodo 1936-1959. Desde la mínima presencia de espectáculos de este tipo durante el conflicto bélico español, al esplendor y efervescencia que experimentó durante la Posguerra inicial y la posterior decadencia, tanto del público que asistía como del tipo de representaciones, pasando por la alternancia entre éxitos y fracasos. También como las propias producciones se vieron afectadas por los eventos españoles e internacionales que se iban sucediendo.
El volumen ha sido presentado en el Conservatorio Profesional de Música de València, en un acto enmarcado dentro del ciclo "Conferencias y conciertos didácticos" que organiza el propio centro de educación musical. El mismo estuvo conducido por la vicepresidenta de la Diputación de Valencia, Maria Josep Amigó, quien destacó que Compendium musicae, la colección de la Institució Alfons el Magnànim en la que se enmarca la obra presentada, «adquiere un nuevo impulso con este trabajo, al cumplir muchos de nuestros principales objetivos: difunde la cultura escrita, difunde la cultura musical y proporciona un nuevo instrumento cultural en valenciano», remarcó la vicepresidenta.
Por su parte, Josep Antoni Alberola, codirector de las colecciones de Música del Magnànim, incidió en que este libro resulta heredero de La historia de la ópera en Valencia, un trabajo realizado por el antiguo director de la Institució Alfons el Magnànim, Arturo Zabala. «Un libro básico, aún en nuestros días, para conocer la producción y representación operística propia del siglo XVIII», apuntó.
El guionista y dramaturgo Rodolf Sirera subrayó que se trata «de un libro amenísimo incluso para aquel lector que no dispone de conocimientos estrictamente operísticos». Un trabajo caracterizado «por una importante recogida de materiales, una profusa investigación a partir de los diarios de la época y el análisis de datos extraídos de los archivos. Gonzàlez Fabra no hace únicamente un inventario de representaciones o de intérpretes y compañías, sino que, lo más importante, las contextualiza, nos relata los hechos históricos que están aconteciendo en cada momento». Un tratamiento que convierte Crònica de l’òpera representada a València (1936-1959). La Guerra Civil i la Postguerra, en «un trabajo modélico».
«A partir del material de archivo recogido establecí un hilo temporal de todas y cada una de las representaciones. Un trabajo acompañado de la búsqueda de grabaciones sonoras de los cantantes a los que hace alusión el libro, procurando la misma época e interpretando las mismas obras», relata Ernest Gonzàlez Fabra. «Una de las actividades que mayor placer me ha proporcionado durante todo el proceso de producción y, a su vez, esencial para poder desarrollar este trabajo», ha explicado el propio autor.
Crònica de l’òpera representada a València (1936-1959). La Guerra Civil i la Postguerra sumerge a los lectores curiosos y especializados en los aspectos más interesantes alrededor de los espectáculos operísticos que se representaron en el Teatro Principal de València durante las décadas de los treinta, cuarenta y cincuenta. El libro está realizado sobre la base de una recopilación exhaustiva, cronológica y contextualizada de todas las funciones de ópera, tanto española como internacional (con una gran presencia de espectáculos provenientes de Italia), durante el período estudiado por Gonzàlez Fabra.
El acto concluyó con la interpretación de piezas de Emilio Arrieta, Giuseppe Verdi y Giacomo Puccini a cargo de la soprano Carmen Avivar, acompañada al piano por Fernando Taberner.
