Una más de Pepe Gotera y Otilio
Recuerdo que de pequeño cuando llegaban las vacaciones estivales me solían regalar unos libros de cómics que recopilaban las aventuras y desventuras de diversos personajes que con sus andanzas divertían y arrancaban enormes carcajadas y sonrisas a aquellos que cursábamos la EGB.
En estos almanaques se narraban las historietas y peripecias de los superagentes Mortadelo y Filemón y de los ñapas Pepe Gotera y Otilio, todos ellos obra del magistral dibujante de tebeos Francisco Ibáñez.
No es que las rigideces de las altas temperaturas y la insufrible humedad propia de la calima estival valenciana me hayan fundido los plomos o me estén derritiendo lentamente la materia gris, es que lamentablemente he vuelto a comprobar, al igual que miles de valencianos, que nuestra ciudad vuelve a ser noticia en los informativos y programas de debate nacional, gracias a las peripecias de ciertos asesores del extinto grupo municipal popular.
Según hemos podido ver y leer, estos asesores hacían chanza y se jactaban en su grupo de whassap de las entretelas y tejemanejes que realizaban para, supuestamente, blanquear los billetes de 500, con los que se habría financiado la campaña del PP local el pasado año.
El tema es que este asunto no es una coña, sino una mancha más en la ya perjudicada imagen de nuestra ciudad en el ámbito nacional a cuenta de la corrupción. Aquí no había agentes de la TIA cerca, sino la UCO de la Guardia Civil a la que los avezados asesores no esperaban.
No sé que cara se les quedaría a los agentes de la Benemérita al leer por primera vez los mensajes del mentado grupo de whassap, pero tal vez llegaran a pensar que Pepe Gotera y Otilio o Mortadelo y Filemón hubieran sido más cuidadosos a la hora de narrar o publicitar sus hazañas, que debieran haber sido en teoría -dada su condición laboral- la de ayudar a potenciar, entre otros asuntos, el empleo, la innovación y la cultura en esta ciudad.
Me hubiera gustado enormemente haber hablado en esta columna de que Valencia ha sido noticia por convertirse en el nuevo polo turístico urbano del Mediterráneo, tras la saturación de Barcelona o de que el Centro de Investigaciones Príncipe Felipe es líder en patentes médicas, gracias a los fondos que recibe anualmente o de que el empresariado indígena ha seguido en masa el ejemplo de la Fundación Hortensia Herrero y está rehabilitando el patrimonio artístico e invirtiendo en la Marina de Empresas.
Todo ello, meras quimeras e ilusiones ópticas, dada la cruda realidad que nos rodea, pues volvemos a ser motivo de risa y carcajada en los medios periodísticos de cabecera de la Meseta, que mira al Levante con desdén y socarronería, pues nuestra actualidad sigue siendo la de las playas abarrotadas, las operaciones salida, los sucesos y los operativos anticorrupción, que en ciertas ocasiones son dignos de tebeo.
@PereMartnez1