Una tesis doctoral concluye que el Cáliz de Valencia pudo ser, con un 99,9% de probabilidades, el Santo Grial de la Última Cena
La búsqueda del Santo Grial termina en Valencia. Así lo demuestra la investigadora Ana Mafé García en su tesis, que documenta que el Cáliz de Valencia pudo ser, con el 99,9% de probabilidades, el que se utilizó en la Última Cena, según la metodología de investigación aplicada.
Mafé, doctora en Historia del Arte por la Universidad de Valencia, ha presentado las conclusiones del primer estudio en el mundo de la protohistoria del Santo Cáliz, respaldadas con pruebas documentales y científicas. “Estando en Jerusalén consultando con expertos en la materia, descubrimos aportaciones que hasta la fecha no se conocían. Ejemplo de ello es que el Santo Cáliz es una verdadera copa hebrea y nunca se había catalogado así. Analizando el material pétreo de la copa observamos que está hecha sobre piedra catalogada en la Antigüedad como sardius, representativa de la tribu de Judá, a la que perteneció Jesús de Nazaret”, comenta la investigadora.
Otra aportación es una nueva lectura a inscripción del pie del Cáliz de Valencia. A través de un triángulo en la base de la epigrafía, se ha conseguido resolver un mensaje encriptado hasta la fecha: “Se alude a Jesús en su nombre hebreo, en base al idioma hebreo y árabe aljamiado”.
Con los resultados obtenidos de la tesis, la doctora Ana Mafé ha empleado la regla de Laplace, un barómetro científico de probabilidad, sobre las cuestiones técnicas que debería de cumplir el Santo Grial, en base a los preceptos judíos del siglo I y a la tradición que sustenta a cada una de las supuestas copas que se han sometido a dicha prueba. Así pues, ante este mismo escenario, el Cáliz de Valencia cumple el 99,9% de los requisitos, mientras que el porcentaje para el cáliz de doña Urraca de León es del 33%.
Como novedad, el estudio cataloga el Santo Cáliz de Valencia, por primera vez, como Kos Kiduhs Esther – 2018 Valencia, y certifica que es la única copa de ese periodo que se conserva entera en todo el mundo. “Al tratarse de una copa hebrea, coetánea a la época de Herodes, la datación en su primitivo entorno la sitúa en el periodo del segundo templo de Jerusalén”, añade la investigadora.
La tesis doctoral de Mafé se titula ‘Aportes desde la Historia del Arte al turismo cultural: el Santo Cáliz de Valencia como eje del relato turístico que sustenta el Camino del Santo Grial en el siglo XXI’ y se ha podido realizar gracias a una beca dentro del programa #verysentirlacultura del Centro Óptico Losan. Mafé incide en la importancia de esta beca y comenta: “Si todas las PYMES becaran un doctorado, en una década Valencia sería Harvard”.
El Santo Cáliz, eje vertebrador del turismo en la Comunitat
El estudio también pone en valor el papel de la sociedad valenciana, a lo largo de los siglos, en la custodia de la reliquia. Algo que llega a nuestros tiempos como elemento clave en la oferta turística en la Comunitat Valenciana.
En esta línea, José Gisbert, director general de Turismo, ha destacado “la fuerza simbólica y el potencial turístico, económico, cultural y social que tiene contar con un relato, basado en estudios científicos, sobre el Cáliz de Valencia”.
El acto de presentación ha contado, además, con el respaldo del Ayuntamiento de Valencia, con la presencia de asesora Pilar Bernabé y el de la Catedral de Valencia, con la intervención de Juan Miguel Díaz Rodelas, custodio celador del Santo Cáliz de Valencia. Asimismo, ha asistido la investigadora Ángela Di Curzio, doctora en Historia del Arte por la Universidad de Roma y de la doctora María Gómez, profesora titular de la Universidad de Valencia.
Durante la presentación, celebrada en el Museo Aula Grial de Valencia, se ha facilitado un dossier de documentación con las principales aportaciones.
La doctora Ángela Di Curzio dará una conferencia en el Centro Español de Sindonología esta tarde a las 19h en Valencia, donde ratificará la hipótesis de Ana Mafé sobre que existen pruebas que evidencian que el Santo Cáliz de Valencia estuvo en Roma los primeros siglos de la cristiandad.
Del grueso del texto de la tesis serán publicados varios manuales que desgranarán la investigación que se ha llevado a cabo durante cinco años en lugares como San Juan de la Peña, Roma y Jerusalén.