Las mejores residencias de ancianos para velar por el bienestar de tus mayores
Cuando nuestros padres o abuelos dejan de ser independientes, pronto nos envuelve una sensación de estrés. Cuidar de ellos, al igual que hicieron por nosotros cuando éramos niños, es una prioridad que no podemos pasar por alto. Sin embargo, el resto de las responsabilidades de nuestra cotidianidad muchas veces nos impiden lograrlo; motivo por el cual conviene estudiar en quién podemos confiar para esta labor. Las residencias de ancianos siempre han estado teñidas de cierta impopularidad; no obstante, con la reciente digitalización geriátrica, esto ha cambiado radicalmente. Una transformación del mercado que repercute en el bienestar de nuestros mayores.
La digitalización geriátrica para el bienestar de nuestros ancianos
El paradigma online está caracterizado por la transparencia y la accesibilidad, puesto que nos otorga la posibilidad de saber de antemano qué o a quién estamos contratando. En el caso de las residencias geriátricas concertadas en Valencia, al igual que las públicas y las privadas, esto por fin se ha hecho realidad. Es decir, en la actualidad han surgido plataformas online que nos sirven de guía para que analicemos en detalle qué residencias son las mejor valoradas para así asegurar que nuestros ancianos disfrutan al máximo de la tercera edad.
Este fenómeno comercial se conoce como digitalización geriátrica y conviene conocer las plataformas web que presumen de un rigor inigualable en su catálogo. Algunas de estas páginas han elaborado un exhaustivo filtro de calidad para que sepamos que las residencias que forman parte del portal están a la altura de las circunstancias. Dado que dichos sitios web son espacios publicitarios para estas residencias, cabe señalar que esto también ha provocado que las propias empresas geriátricas se comprometan a la hora de ofrecer el mejor de los servicios posible.
Así pues, resulta evidente que los mayores beneficiarios de este cambio estructural en el mundo de las residencias son los ancianos. Mientras que nosotros tenemos la certeza y tranquilidad de que nuestros padres y abuelos están en buenas manos, ellos disfrutan en plenitud de sus últimos años de vida. Una etapa de la vida que, con los cuidados adecuados -tanto en lo físico como en lo emocional- resulta maravillosa. Por lo tanto, es nuestra responsabilidad adaptarnos a estas nuevas plataformas web y así asegurar que el centro que contratamos está supeditado a la calidad asistencial esperada.
Encuentra un centro de confianza para tus padres o abuelos
Ya hemos visto que la digitalización geriátrica actúa de pilar esencial en los márgenes de calidad de vida de nuestros ancianos. Las nuevas plataformas web nos permiten encontrar residencias de mayores en Valencia de confianza y calidad; sin embargo, merece la pena ahondar en los factores a los que hemos de prestar una especial atención. De este modo, antes de invertir nuestro dinero tendremos la seguridad de que tanto las instalaciones del lugar, como los empleados que allí trabajan repercuten positivamente en su bienestar. Dos aspectos que, como cabría esperar, podemos valorar fácilmente y con la máxima transparencia desde dichos sitios web de residencias de ancianos.
Lo primero en lo que nos solemos fijar es en el precio y, a pesar de que los centros pueden ser privados, públicos o concertados, conviene no ser prejuiciosos. Los más baratos también pueden ser de alto nivel. Esta calidad depende en gran medida de los servicios que nos brindan, tanto los sanitarios -enfermería, terapia ocupacional, cuidados paliativos, fisioterapia -, como los de ocio -paseos por el parque, salas de juegos, sesiones de entretenimiento -. En este segundo caso, todo depende de las instalaciones; por lo que antes de hacer la contratación final, conviene acudir presencialmente a la residencia para analizar las áreas comunes y las habitaciones.
A su vez, la ubicación es un factor que debemos valorar. Si dejamos a nuestros padres y abuelos en lugares lejanos o con mala conexión de transporte público, visitarlos será una auténtica odisea. Por ende, para mantener el contacto con ellos, lo más aconsejable es que valoremos las distancias. Un análisis que ya sabemos dónde hacer y que servirá para devolver todo el cariño que nos dieron cuando los que necesitábamos ser cuidados éramos nosotros.