La Marina de València acogerá el congreso Smart Cities for Smart Citizens
Ciudades inteligentes sí, pero sin olvidar a sus habitantes. Este es el enfoque del congreso que se celebrará en junio en València bajo el título Smart Cities for Smart Citizens. La iniciativa se enmarca en La Marina de València Living Lab, un espacio de experimentación urbana que se desarrollará de forma permanente en el recinto marítimo. El evento está organizado por The Hub, factoría de ideas de origen valenciano especializada en conectar empresas y organizaciones con la cultura y la innovación.
Desde la visión de la tecnología como medio y no como fin, el encuentro pretende romper los mitos sobre las Smart Cities. “Es posible que la tecnología no haya cambiado tanto las ciudades como oímos decir normalmente y pienso que les grandes transformaciones que vendrán no tendrán ya la forma de edificios, aparatos o infraestructuras, sino que tendrán que ver con la gestión y los usos”, ha señalado Ramón Marrades, Director Estratégico del Consorcio València 2007, entidad gestora de La Marina de València.
Este encuentro multidisciplinar reunirá a expertos internacionales de centros de conocimiento como Berkeley, MiT o Stanford, así como a representantes del sector público valenciano e internacional. En el congreso se debatirán conceptos como tecnología frente a individualización, beneficios de la regulación, brecha digital y exclusión en la nueva sociedad de la información, el rol de los poderes públicos y la responsabilidad de las empresas en las ciudades del siglo XXI.
En una vertiente más práctica, las empresas participantes responderán a desafíos concretos planteados por La Marina de València en las áreas de movilidad, Internet de las Cosas (IoT), urbanismo, energía, medio ambiente y regulación.
Smart Cities for Smart Citizens busca formular la emergencia de una nueva realidad urbana que destaca la complejidad de la ciudad como espacio de conflicto donde aparecen dinámicas contrapuestas, exigencias de participación, problemas de desigualdad, comprensión de la diversidad…en definitiva, nuevos retos urbanos que el discurso debe atender para su revisión y longevidad.
“Un panel de expertos reclutados por el periódico The Atlantic identificó las 50 innovaciones más importantes de la historia de la humanidad: en esa lista estaba la penicilina, la rueda o la electricidad pero ninguna de esas innovaciones había sido inventada en los últimos 50 años. La lista se olvidaba de la innovación más importante que es precondición de todas las otras: la ciudad. Vivir juntos es lo que nos hace productivos, cultos e innovadores”, concluye Marrades.