¡No puedo con el látex!
Hay personas que practicar el sexo con preservativo les puede traer más de un quebradero de cabeza. Pero si se protegen con preservativo, ¿qué mal les puede pasar? La respuesta es muy sencilla: la alergia. Cada vez aumenta más el número de personas que a la hora de empezar lo que debería ser un acto de disfrute y goce como es el sexo, empieza para ellos una lucha interna, pensando en las consecuencias que esto le puede acarrear en su piel. Un picor y un enrojecimiento insoportable durante los días posteriores al acto sexual.
Y es que el origen de todo esto se encuentra en su fabricación, al látex se le añaden diferentes sustancias químicas que provocan esa molesta reacción en la piel en aquellas personas incapaces de tolerarlas. Una serie de conservantes, aceleradores, antioxidantes, antiozonantes y plastificadores son las sustancias responsables de la dermatitis que pueden llegar a sufrir.
Esta intolerancia al látex provoca una molesta sequedad, picazón, y que las zonas sexuales se enrojezcan y se irriten. Pero las consecuencias no solo llegan ahí, estornudos, ojos llorosos, mucosidad e incluso síntomas asmáticos pueden ponérselo más difícil a la gente con esta patología.
Cómo la desarrollo y qué debo hacer para que me la diagnostiquen
Uno no nace con la alergia al látex si no que ésta se reproduce con los años debido al contacto de la persona con ciertos productos y materiales. Hay gente que jamás la desarrollará pero otra con una sensibilidad más especial a los químicos puede hacerlo. Por ejemplo, un contacto continuado con prendas de nylon, pañales, periódicos, globos, toallas femeninas o incluso algunos alimentos como las bananas, los plátanos, los aguacates, los kiwis y las castañas pueden hacer que en una persona evolucione esta alergia. Aunque hablaríamos de casos extremos.
Al realizar el acto sexual con condón en el plazo de 6 a 48 horas uno puede notar los síntomas descritos anteriormente y es aconsejable que acuda a su dermatólogo y le realice unas simples pruebas de sangre y de alergia. Puede ser que no sepa que es alérgico al látex.
No dejes de protegerte: usa el condón de poliuretano
Existe un error grandísimo al pensar que al ser alérgico al condón normal, el de látex, uno debe practicar el sexo sin él. Estaríamos evitando esas rojeces y molestias pero seríamos una esponja para enfermedades de transmisión sexual. No se puede caer en este error.
Para la gente alérgica a las sustancias que conforman la goma no tienen porque pensar que su vida sexual ha cambiado o puede verse reducida. La vida sexual de un alérgico al látex es y debe ser como la de cualquiera, y todo lo brillante que la persona quiera –dependiendo de factores ajenos a esta intolerancia- y protegiéndose gracias a los preservativos de poliuretano.
Son preservativos de mayor grosor y algo más resistentes Soportan mejor cualquier sustancia lubricante que sea utilizada. Como algo negativo a destacar, su precio. Una caja de condones puede llegar a costar 18 euros.
Igual de válidos y con las garantías de control realizadas por las distintas empresas que los comercializan, vale la pena gastarse un poco más pero estar seguro. Alérgicos o no alérgicos, el condón es la mejor manera para prevenir enfermedades y que este elaborado de látex o poliuretano es lo de menos. Lo importante es usarlo.
