La edad media de inicio del uso de teléfono móvil en Valencia es de 10 años
“Digo o hago cosas por Internet que no sería capaz de decir o hacer en persona”. Este testimonio, que se incluye entre los recogidos en el ‘Estudio del uso de las tecnologías de la información y la comunicación en menores de la provincia de Valencia’, cobra especial trascendencia a la luz de las conclusiones de este informe, entre las que destaca que la edad media de inicio del uso de teléfono móvil se sitúa en los diez años, nivel que se reduce a los nueve años en el caso de tablets y consolas de videojuegos. El desconocimiento sobre los impactos reales, positivos y negativos, del uso y abuso de las nuevas tecnologías por parte de la población infantil y juvenil ha llevado a la Diputación de Valencia a encargar a E-value (consultora especializada en el desarrollo de proyectos de sensibilización social) este informe, que será presentado el próximo 27 de marzo, en una jornada que se celebrará en Las Naves de Valencia (Sala la Mutant).
Este evento, que contará con dos mesas redondas de expertos, será inaugurado por el presidente de la Diputación de Valencia, Antonio Francesc Gaspar, y la clausura correrá a cargo de la Diputada del Área de Bienestar Social, Mercedes Berenguer. Acudirán representantes institucionales de los 29 municipios a los que se ha extendido el estudio (todos ellos, de menos de 20.000 habitantes), así como de los centros educativos que han participado directamente. El foco se ha centrado en niños y adolescentes de entre 9 y 16 años.
El documento recoge, por primera vez en la provincia, información y estadísticas sobre los usos de las tecnologías –para qué se utilizan; tiempo de conexión diaria y franjas horarias; malos usos; exposición a riesgos; conocimiento y medidas de seguridad aplicadas,…-, y posibles acciones de prevención e intervención, tanto por parte de los usuarios como por sus progenitores y docentes. Cada punto se ha analizado teniendo en cuenta diferentes grupos de edad, sexo y características de la población de residencia.
El uso de Internet permite desarrollar destrezas en la socialización y habilidades cognitivas, así como ayudar a crear la personalidad del menor, pero, al mismo tiempo, el abuso de las tecnologías puede llegar a causar trastornos emocionales, pérdida de control, cambios en la autoestima, aislamiento social, problemas psicosociales, de sueño o bajo rendimiento académico, entre otros.
“El nuevo enfoque educativo que hay que realizar en el ámbito de las TIC no se debe limitar a transmitir sólo conocimientos, sino que, además, debe procurar capacitar en determinadas destrezas y habilidades, que susciten actitudes y disposiciones adecuadas que ayuden a distinguir en qué nos ayudan y en qué nos limitan, para poder actuar en consecuencia. El ámbito familiar y el escolar, necesitan conocer y reconocer las ventajas tecnológicas y los nuevos espacios de participación que ofrecen para la familia y contar con herramientas que faciliten su función educativa y protectora frente a posibles riesgos”, subrayan los responsables de E-value (diseño de proyectos de sensibilización social).
Este proyecto se enmarca en el Programa Provincial de Drogodependencias de la Diputación de Valencia, vigente desde el año 2002. Una de las líneas de actuación es el programa de prevención del mal uso o abuso de las tecnologías, DIP-TIC, que tiene como objetivo profundizar en el conocimiento de este fenómeno e impulsar intervenciones educativo-preventivas que permitan dar respuesta eficaz a las necesidades y retos que plantea.
Los objetivos del programa son modificar la percepción de riesgo y dotar de conocimientos sobre los principales problemas derivados del uso de las distintas tecnologías; mejorar el conocimiento y capacitar en destrezas y habilidades para el control tecnológico, y definir estrategias de reducción de riesgos frente a posibles situaciones problemáticas derivadas del uso de las tecnologías. Por todo ello, se ha abordado desde una doble perspectiva, que aúna aspectos preventivos con conocimientos sobre el correcto manejo de nuevas tecnologías (con monitores expertos en cada uno de los ámbitos). El informe redactado por E-value forma parte del proceso de evaluación del impacto real y resultados del programa piloto DIP-TIC.
