Kronborg, el castillo de Hamlet

Está considerado el escritor en lengua inglesa más conocido de la historia, William Shakespeare y sus obras se han traducido a decenas de idiomas alrededor del mundo. Los escenarios de sus obras se han convertido a su vez en todo un reclamo cara a los amantes de la literatura clásica inglesa y lugar de peregrinaje de los fans de las obras teatrales del afamado escritor.
Una de sus obras más reconocidas es, sin duda, La tragedia de Hamlet, Príncipe de Dinamarca, simplemente conocida como Hamlet. Una pieza teatral que tiene en la venganza su tema principal. La venganza de Hamlet en búsqueda de la verdad sobre la muerte de su padre y que tiene al castillo y fortaleza de Kronborg como escenario principal de esta oscura tragedia.
Kronborg, el castillo de Hamlet, está considerado desde hace más de una década como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Construido en 1420 y ampliado en 1574, es todo un icono nórdico repleto de mazmorras y pasadizos y es, en la actualidad, sede del Museo Marítimo y de Comercio de Kronborg.
Se encuentra cerca de la ciudad danesa de Elsinor y de ahí que en la obra de Shakespeare, Elsinore fuera su nombre. Kronborg es todo un acontecimiento visual para los turistas de la fría y tranquila costa danesa, repleta de pueblos pesqueros. En sus alrededores, se creó la ciudad de Helsingor.
Durante varios siglos, Dinamarca tuvo en Kronborg, el castillo de Hamlet, una importante fuente de ingresos. Y es que los barcos que atravesaban el estrecho de Oresund debían pagar una tasa y así durante más de cuatro siglos. Pero Kronborg no siempre se llamó así, obtuvo ese nombre en 1585 cuando Federico II decidió reconstruirlo bajo aires renacentistas donde recrear importantes obras teatrales.
Con anterioridad, éste era una fortaleza sobre el mar construido en los primeros años del 1400 por el rey danés Erico de Pomerania. Pese a sufrir un severo incendio en 1639, fue reconstruido por el rey Cristian IV aunque las crónicas de la época aseguraron que Kronborg nunca llegaría ya a tener el esplendor de antaño. A partir de ese mismo siglo y en una Europa repleta de batallas y conflictos entre países, Kronborg se reforzó con una serie de murallas convirtiendo a este en una de las edificaciones más fuertes de toda Europa.
En la actualidad, en sus jardines iluminados con antorchas se representa de forma ocasional Hamlet y en sus interiores, reposa la figura del jefe vikingo Holger Danske, un personaje mítico de la época de Carlomagno.