Huevos rotos con jamón ibérico: Una receta deliciosa y saludable
Los huevos rotos con jamón son un plato muy popular en la gastronomía española. Fáciles de preparar, necesitan muy pocos ingredientes y son muy apetitosos. Sin embargo, a pesar de ser una de las recetas de dificultad, puede ser un auténtico disfrute para el paladar, especialmente en estas temporadas de frío, si acompañamos el plato con un jamón de buena calidad
No necesitaras muchos ingredientes, pues bastará con huevos, patatas y el punto fuerte de este plato, el jamón ibérico. Una buena opción es optar por uno de la marca de El Pozo. Este gigante del fiambre dará el toque perfecto a nuestro plato, pues el Legado el Pozo, es conocido en todo el territorio español
Y es que, los jamones de buena calidad, no tienen solo una sabor excelente, si no que también son una opción perfecta para cuidar de nuestra salud, especialmente por ser una gran fuente de proteínas de alto valor biológico. Del mismo modo, el jamón aporta minerales y vitaminas, como la B1, muy recomendados en periodos de lactancia y convalecencia.
Asimismo, el jamón es un ingrediente perfecto para luchar contra la osteoporosis pues es un alimento rico en hierro, además de ser un potente antioxidante ya que tiene un gran contenido en selenio y zinc.
Por último, el jamón es un ingrediente perfecto para dietas bajas en carbohidratos, pues se trata de un fiambre que no tiene prácticamente este tipo de nutrientes, que en exceso pueden provocar un aumento del peso.
Todo ello hace que, los huevos rotos con un jamón de buena calidad, como los productos de El Pozo, no solo es una receta deliciosa, si no que también puede ser una opción saludable si se consume con moderación.
Preparación
- Primero hay que encargarse de las patatas. Tienen que pelarse y lavarse bien con agua. Luego estas tienen que cortarse en rodajas de medio centímetro. Luego se tienen que poner a secar en papel de cocina.
- Llegó la hora de la sartén. Se ponen a freír las patatas con aceite hirviendo a medio fuego durante unos 10-12 minutos, aproximadamente.
- Cuando las patatas estén listas, ni muy crujientes ni cocidas, se sacan de la sartén y se escurren bien.
- Se les hecha sal y pimienta y se las deja en una fuente apartadas de momento.
- Ahora hay que centrarse en los huevos. Con la misma sartén pero con menos aceite freímos los huevos, que no deben quedarse muy hechos, ya que la yema debe quedarse bien líquida.
- Cuando tengamos los huevos hechos se añaden a la fuente donde estaban las patatas y se trocea y mezcla todo con la yema de huevo.
- Por último, añadimos el ingrediente estrella del plato, el jamón ibérico.
Para el jamón no hay dudas de que el Legado el Pozo es la mejor opción. Legado Ibérico incorpora los grandes valores de la ganadería ibérica y una alimentación enriquecida con ácido oleico para asegurar un producto óptimo, de perfil nutricional saludable y con el mejor sabor.