La Noche de San Juan: renacer de las cenizas

Vicente Boluda

Cuenta la leyenda que desde tiempos inmemoriales los labradores alicantinos encendían hogueras para celebrar, en honor a San Juan, el día más largo del año para recoger los frutos de la tierra, y la noche más corta para la destrucción de los males. La cosa se fue tanto de madre que, extendida la celebración a la ciudad de Alicante, el alcalde tuvo que prohibir las hogueras en las calles o el disparo de cohetes en la noche de San Juan, bajo multa de cien reales. Sin embargo, en 1881 un despiste provocó que la prohibición no se anunciara en el bando de la ciudad, dando lugar a una celebración multitudinaria que quedaría instaurada en el devenir de los tiempos.

Celebración, la de San Juan, que aún siendo de origen cristiano, ha venido atribuyéndosele ciertos orígenes paganos, no sólo por el tipo de rito, sino principalmente por su cercanía al solsticio de verano, celebrado el 21 de junio en muchas partes del mundo, también con el encendido de multitud de hogueras o fuegos. No puede obviarse que hay cierta influencia en la celebración cristiana de aquéllos ritos paganos (la proximidad de las fechas, la forma de celebrar el rito, o el significado del mismo), pero la realidad es que el 24 de junio fue la fecha en la que nació San Juan Bautista, con lo que el origen cristiano de la festividad es indiscutible.

Con el paso del tiempo, la celebración de esta fiesta se ha ido extendiendo por gran parte de la Comunidad Valenciana y el resto de España. Así, el próximo sábado  Valencia también brillará desde los cielos con el encendido de miles de hogueras: por un lado, los miles de valencianos que celebrarán la noche alrededor de un fuego en la playa; por otro, gracias a un gran número de comisiones falleras que organizarán fiestas por toda la ciudad. La diversión en el Cap i Casal está garantizada. Sin embargo, esa diversión no puede verse empañada por los excesos de unos pocos, o la dejadez de muchos. Así, el año pasado las consecuencias de la diversión también brillaron: 21.000 kilos de basura en las playas de la ciudad; decenas de peleas (incluso una de ellas acabó con el fallecimiento de un joven), servicios de urgencias colapsados por las agresiones, quemaduras, comas etílicos o ahogamientos, etcÂ…

La celebración de la Noche de San Juan tiene también un componente simbólico: el fuego purificador, protagonista principal de la noche, arrasa con todos los males que arrastramos y nos ofrece una nueva oportunidad. Sin embargo, si queremos convertirnos en ese Ave Fénix que renace de sus cenizas con mayor esplendor y fuerza, no podemos hacerlo sin el compromiso personal de pasar esa noche de diversión con los amigos en armonía y con responsabilidad. ¡Feliz Noche de San Juan!

@VBoluda