Generalitat, Diputació y Ayuntamiento aúnan esfuerzos para conseguir unas Fallas más sostenibles
Recabar información y estudiarla para hacer un plan estratégico con el que conseguir que las Fallas sean lo más sostenibles posible. Con este propósito ha sido presentado el proyecto Per unes Falles Sostenibles, del que participan de forma conjunta el Ayuntamiento de València, la Diputació de València y la Conselleria de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural, el cual pretende estimar el impacto real de la fiesta en los ámbitos económico, social, turístico y medioambiental en la ciudad de València y en los municipios de las comarcas valencianas donde se celebra esta festividad. Un estudio estratégico de amplio espectro que permitirá disponer de un diagnóstico global de la fiesta a partir del cual determinar medidas, actuaciones y procesos de mejora que beneficien la fiesta en su conjunto, elaborando un Plan de Acción o Plan Estratégico de las Fallas que tenga en consideración a todos los colectivos que participan.
Durante el acto de presentación del proyecto, el concejal de Cultura Festiva en el Ayuntamiento de València, Pere Fuset, ha subrayado que mediante estos estudios técnicos y cualitativos «dispondremos de la información necesaria que nos permita realizar un diagnóstico de la fiesta, desmitificar tópicos y tomar las mejores decisiones para apostar por una fiesta más sostenible desde un punto de vista económico, social y ambiental, para hacer de las Fallas una fiesta mejor». Fuset ha asegurado que la declaración de las Fallas como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad «es una gran responsabilidad y nos obliga a buscar la excelencia y a trabajar para hacer mejor nuestra fiesta». Por ello, y en el marco del acuerdo para conseguir unas fallas sostenibles, en todas sus vertientes, la Concejalía de Cultura Festiva ya ha desarrollado un estudio sociológico para conocer cómo vive la fiesta el colectivo fallero, y ha encargado otro para saber la parte de la fiesta que más gusta a los turistas.
Por su parte, el diputado de Medio Ambiente, Josep Bort, ha puesto en valor el hecho de que «las diferentes administraciones podamos llegar a acuerdos y confluir en el desarrollo de proyectos comunes». En este caso, «varios estudios que dimensionan y evalúan el impacto de las Fallas». Bort ha explicado que la puesta en práctica de este proyecto contempla tres fases. «Una primera encaminada a la elaboración de estudios técnicos que analicen todos los actores que participan en la fiesta. Una segunda en la que, a partir de los datos obtenidos en los estudios previos, permitirá la elaboración de un Plan de Acción o Plan Estratégico de las Fallas. Y en última instancia, un proceso de seguimiento de esta guía de buenas prácticas a lo largo de los años».
En este sentido, será de gran importancia las acciones encaminadas «a sensibilizar y concienciar a los actores implicados para poder impulsar y promocionar las Fallas desde la vertiente de la sostenibilidad, no exclusivamente durante la semana fallera, sino a lo largo de todo el ciclo fallero», ha especificado Bort.
La consellera de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural, Elena Cebrián, ha manifestado el interés de la Generalitat por participar de este «estudio científico sobre los impactos, tanto positivos como negativos, de la fiesta». Y en este sentido, «en estudios dirigidos a estimar la calidad del aire, de los materiales, de la generación de residuos, del consumo de agua o el consumo de energía, entre otros, que en una sociedad cada vez más concienciada es importante que se tengan en cuenta, también durante las Fallas». Unas acciones, ha incidido la consellera, «no sólo orientadas a las comisiones falleras y a los artistas falleros, sino también a los turistas y visitantes, para que podamos disfrutar de las Fallas de una forma más sostenible y cuidada, así como de nuestras ciudades, todos los días y también durante las Fallas».
Este estudio se complementará con actividades de sensibilización dirigidas tanto a la población en general, con el fin de fomentar comportamientos y hábitos sociales más sostenibles; como también al colectivo fallero, para promover una gestión sostenible de los centros. Además, también se está trabajando en la posibilidad de propiciar acciones de voluntariado ambiental fallero.
Para la obtención de los resultados, la propuesta metodológica considerará la ciudad de València, al ser ésta la que concentra la mayor actividad fallera, así como a un conjunto de pueblos y ciudades del resto de las comarcas valencianas representativas de la actividad fallera.
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