La exposición "Intacta Maria" recibe más de 46.300 visitantes
ición "Intacta María. Política y religiosidad en la España barroca" del Museo de Bellas Artes de València ha sido la exposición temporal que más visitantes ha recibido en el último año, con un total de 46.300 personas hasta el pasado mes de marzo.
Las 53 obras de arte del barroco español que analizan el misterio de la Inmaculada Concepción de Maria en el siglo XVII se abrió el 1 de diciembre.
El director del museo, José Ignacio Casar, ha realizado un balance muy positivo y ha señalado que "la calidad de los cuadros exhibidos y la curiosidad de los ciudadanos, porque es la primera vez que se muestra mediante una exposición el complejo proceso de fabricación de la devoción de la Virgen, han sido elementos claves para el éxito de esta muestra".
En cuanto a las obras que se pueden contemplar, destacan la 'Virgen Tota Pulchra', de Juan Sariñena; 'Fiestas de consagración de la iglesia del Sagrario de la catedral de Sevilla en 1662', que muestra la primera imagen de la Inmaculada que se expuso en un espacio público en España; la gran 'Alegoría de la Inmaculada Concepción', de Juan de Roelas, de 1616, o 'La Inmaculada Concepción con los jurados de la ciudad de Valencia', realizada en 1662 por Jerónimo Jacinto de Espinosa.
También han atraído al público las actividades que ha organizado el museo alrededor de la exposición, como el concierto de música valenciana del siglo XVII en torno a la Virgen María celebrado el 17 de diciembre, un ciclo de cuatro conferencias con destacados especialistas en los meses de enero y febrero y un taller didáctico específico sobre la iconografía inmaculista.
La exposición "Intacta María. Política y religiosidad en la España barroca" estaba comisariada por el profesor de la Universitat Jaume I de Castellón Pablo González Tornel y presentaba de manera científica la devoción a la Inmaculada Concepción de María en el siglo XVII.
A partir de 1616, la monarquía hispánica se situó de manera decidida del lado de los defensores de que la Virgen fue concebida sin pecado original, convirtiendo esa defensa en un asunto de estado. De esta forma, la presión española acabaría obteniendo de los papas Pablo V, Gregorio XV y Alejandro VII la expedición de una serie de decretos en 1617, 1622 y 1661.
Todos ellos fueron favorables a la doctrina, pero lo más interesante del asunto fue que la Inmaculada se convirtió, durante el proceso, en la principal devoción de la península Ibérica y en una seña de identidad para todos sus habitantes.
Esta socialización multitudinaria no puede entenderse sin una paralela campaña propagandística que, a través de pinturas, esculturas, obras de teatro, poemas y fiestas, consiguió un éxito fulgurante. Las obras que se muestran en esta exposición han sido seleccionadas especialmente para afrontar todos los aspectos de la poliédrica construcción del misterio concepcionista.
Las obras de esta exposición han procedido del Museo de Bellas Artes de València, el Museo Nacional de Escultura de Valladolid, el Ayuntamiento de València, la Catedral de Sevilla, la Universitat de València, la Biblioteca Valenciana, el Museo de Bellas Artes de Granada, la Biblioteca Nacional de España, el Museo de Huesca, el Museo de Historia de Madrid, la Catedral de València, el Museo Nacional del Prado, el Ayuntamiento de Sevilla, la Real Parroquia de San Andrés de València, el Museo de Bellas Artes de Sevilla, el Arzobispado de València, el Arzobispado de Sevilla, el Real Colegio Seminario de Corpus Christi de València y el Archivo Histórico Provincial de Granada.