Elena Játiva: 'Cantar sobre el pasado me permite gestionar emociones que se quedaron encapsuladas'
¿Cómo empezó tu camino en el mundo de la canción?
Mi camino en el mundo de la canción comenzó con la necesidad de utilizar la palabra para describir cómo me sentía. Cuando era más joven escribía relatos o poemas para liberarme de mí misma, de mis demonios y mis miedos
y esa vía de escape se amplío cuando empecé a tocar la guitarra. Con 15 años me di cuenta de que el llanto era más real si lo cantaba en lugar de recitarlo y desde entonces no he dejado de componer.
Tu estilo se podría definir como melancólico e indie, muy íntimo. ¿Es un género por el que sentías predilección?
Siempre he escuchado un amplio abanico de géneros y es cierto que, en ocasiones, me he sentido más atraída por el indie; pero si hay algo que predomina en toda música que consumo es la tristeza, la nostalgia y la melancolía. Cuando compongo, también lo hago con la intención de transmitir todas estas emociones que siento y me desbordan. Quizá por eso mi estilo tiene esta textura y este tono tan íntimo, pero no podría asumir que hacer lo que hago es una elección consciente.
¿Quién te sirve de inspiración?
Suena a cliché, pero la vida misma, el amor, el dolor y la pena. Soy una persona muy sensible y vivo muy intensamente todo lo que me rodea, tanto lo bueno, como lo malo. Esto hace que necesite expresarme con frecuencia, sobre todo si se combinan el amor y el dolor, el dolor y la pena, la pena y la vida. Siento cierta predilección por las temáticas grises, por lo que las experiencias con este tinte suelen servirme de inspiración.
Dicen que cada artista tiene su proceso de creación. ¿Tienes un rincón y una hora para escribir o las letras aparecen cuando menos lo esperas?
Al principio siempre escribía en mi habitación, generalmente de noche, en voz baja y con la primera libreta o papel que tenía a mano. Después esa rutina se fue degradando y ahora no puedo controlar cómo, cuándo ni por qué compongo, simplemente aparece en el momento menos esperado y tengo que hacerlo. Es algo incómodo, porque he llegado a componer en medio de celebraciones, en el autobús o con mis amigos cantando otras cosas por detrás, pero es instintivo y me resulta más natural que esperar a llegar a casa para hacerlo.
Tus singles hablan de lo que se vive, pero sobre todo de lo que ya se ha vivido. ¿Te pierdes en el pasado para escribir tus canciones?
Generalmente me pierdo en el pasado para escribir. Soy un "animal de records", como dice Estellés, y cantar sobre el pasado me permite gestionar emociones que quizá se quedaron encapsuladas y no pude expresar en su momento. Soy bastante reflexiva y el pasado es algo sobre lo que me hago muchas preguntas.
Hay puntos comunes en tus canciones, como el tiempo, la pérdida y la fuerza del dolor como impulso para continuar. ¿Son coincidencias de estilo que podrían desembocar en un álbum?
El tiempo, la pérdida y la fuerza del dolor son elementos comunes en los temas y en el contenido que hago como artista, porque son elementos comunes también en mi realidad. Así que, sí. Definitivamente. Si existen hilos conductores dentro del proyecto en el que trabajo con Tono Hurtado, estos son algunos de ellos y dentro de unas semanas podréis juzgarlo por vosotras mismas.
Tu último y tercer single es Respirar, publicado este mes. Una canción atemporal que narra el vacío de la ruptura. ¿Se escribe mejor desde la tristeza?
Creo que, en lo que se refiere a la composición, la tristeza se ha convertido en mi zona de confort. Soy un llanto andante y, por supuesto, me resulta más fácil emitir un quejido que una risa cuando canto. Además, el hecho de que la mayor parte de mis referentes se envuelvan de esta emoción facilita que mis procesos creativos tomen esta dirección.
Tus letras no solo son atemporales, sino que cualquiera podría verse reflejado en ellas. ¿Canaliza la música los sentimientos que aún no sabemos definir?
No puedo generalizar y hablar de sentimientos que nadie puede expresar, porque me resulta pretencioso y estoy casi segura de que otros muchos artistas lo hacen mejor que yo. No obstante, canalizo una verdad que es mía, que es real y que yo no puedo expresar con palabras; y creo que es esta veracidad la que permite que otras personas puedan verse reflejadas en mis canciones.
¿Cómo se decide qué instrumental funciona mejor con cada canción? ¿Realizas tú las composiciones?
La elección del instrumental varía en función de algo esencial para mí: la emoción. Cada tema cuenta algo diferente, con un tono diferente, con una intención distinta. La composición inicial de las canciones siempre es mía, letra y melodía, pero Tono Hurtado es el gran traductor de lo que queremos transmitir con cada una de ellas. Tono es el responsable de la instrumentación y de que las canciones tengan esa textura tan especial y única, es quien me ayuda a ponerle un poquito más de corazón a algo que ya sale de dentro del pecho.
¿Cómo han ido los primeros pasos por el escenario? ¿Te sientes cómoda en este tipo de directos o aún cuesta adaptarse al público?
Mentiría si dijese que no me da cierta vergüenza subirme a un escenario y abrirme en canal para todas las personas que tengo delante, porque al final las canciones hablan de mí o de cosas que me afectan
pero mentiría también si dijese que no me encanta. Al principio era extraño sentirse el centro de atención, pero con el tiempo me he ido adaptando y cogiéndole el gusto a ser escuchada cuando tengo algo que decir. Soy nerviosa y lo demuestro siempre antes de cada bolo, pero tras la primera canción siempre pasa algo muy mágico y bonito, y me acabo sintiendo como en casa.
¿Te planteas alguna experimentación con otros estilos musicales?
Me gustaría probar otros estilos musicales, porque creo que todos podrían enriquecer de alguna forma mi aprendizaje como música, pero por el momento estoy centrada en experimentar dentro del estilo que estamos produciendo ahora.
¿Salir a escena en un momento como el actual te ha dificultado la difusión de tu trabajo?
La verdad es que prefiero no pensarlo. No sé hasta qué punto está afectando el momento actual a la difusión de la música teniendo en cuenta que se hace principalmente por las redes sociales pero sí es cierto que las limitaciones en los aforos de los directos y la evolución de la tecnología están cambiando algunos aspectos de nuestra forma de vivir la música.
¿Cómo visualizas la escena musical indie en el panorama valenciano? ¿Está en un momento de auge?
Creo que, en general, el panorama valenciano está en auge en sí mismo. Me siento rodeada de grandes artistas que no dejan de crecer y de lanzarse al mundo con proyectos muy interesantes. Creo que el indie es un género que resulta muy atractivo tanto para los artistas como para lo oyentes. Es uno de los géneros más mainstream en la actualidad.
¿Planes de este proyecto para un futuro próximo?
Estamos trabajando muy duro para presentar el proyecto a principios del 2022. Los planes todavía son inciertos por la situación de inmediatez que vivimos actualmente, pero solo tengo buenas palabras para todas las ideas que tenemos para los estrenos. Los planes son la ilusión y las ganas que le estamos poniendo.
