El método Bordalás

El Valencia CF vuelve a ilusionar. Y eso es noticia, porque la dinámica deportiva del club estas últimas temporadas llevaba consigo adjetivos totalmente diferentes, todo ello acrecentado con la salida de futbolistas importantes a otros clubes, con destituciones de entrenadores y con promesas incumplidas por parte de los máximos mandatarios de la entidad.

 

Pero desde la llegada de José Bordalás al banquillo todo ha cambiado. Ahora mismo el Valencia CF es un equipo con ilusiones renovadas, candidato de nuevo en las promociones de fútbol a pelear por todo en LaLiga Santander, y con una identidad propia forjada a base de humildad y trabajo.

 

 

En el mundo del fútbol, los resultados suelen ser la vara de medir el éxito o el fracaso de un proyecto, y por suerte para el nuevo técnico del Valencia CF, estos están acompañando en este inicio liguero.

 

Y es que el técnico alicantino ha firmado su mejor arranque en primera división, y hay que echar la vista atrás 17 años para ver un inicio mejor que el del Valencia CF este año. Fue con el Alicante en 2B donde firmó un inicio inmaculado con plenos de victorias en los primeros cuatro partidos, pero sin duda que es este último del que más orgulloso se siente el nuevo entrenador del Valencia.

 

 

Una de las cosas que más está llamando la atención de este nuevo Valencia CF son las horas de trabajo que desempeñan los jugadores en la Ciudad Deportiva de Paterna. Acostumbrados a sesiones matutinas cortas en la que los futbolistas apenas estaban 2 horas en su lugar de trabajo, con José Bordalás, los jugadores del Valencia han cambiado sus hábitos de entrenamiento y pasan mucho más tiempo en el recinto deportivo de Paterna.

 

Entre gimnasio, entrenamiento, videos, análisis y tratamiento de fisioterapia, los futbolistas suelen permanecer en la instalación una media de 3 horas diarias, que llegan a ser 4 cuando el entrenador necesita introducir charlas teóricas sobre conceptos tácticos o sobre el rival, algo habitual en muchos clubes de fútbol, pero algo a lo que en Valencia no estaban acostumbrados.

 

Y es que para quien no conozca a los equipos de José Bordalás, una de las señas de identidad es la capacidad de sacrificio de todos sus equipos y la buena preparación de los partidos, sabiendo muy bien a lo que juega el rival, y teniendo muy claros todos los conceptos. Poco o nada deja al azar el técnico alicantino, que quiere hacer del Valencia CF un equipo campeón de nuevo, y está poniendo toda su sabiduría y esfuerzo a servicio de la entidad.

 

Esto no ha hecho más que comenzar, pero el Valencia CF tiene muy buena pinta este año. Jugadores y cuerpo técnico van en la misma sintonía y eso se nota, tanto dentro como fuera del terreno de juego. Los resultados dictarán sentencia a final de temporada, pero hasta el aficionado más pesimista se ha vuelto a ilusionar imaginando los éxitos que puede llegar a alcanzar su equipo esta temporada.