Cultura inicia las visitas subacuáticas al yacimiento arqueológico Bou Ferrer de La Vila Joiosa
La VI campaña de visitas a las excavaciones arqueológicas subacuáticas al pecio Bou Ferrer han comenzado esta semana gracias al proyecto que han promovido la Generalitat, la Universidad de Alicante, el Ayuntamiento de La Vila Joiosa, el Club Náutico y el centro de buceo Ali-Sub.
El yacimiento arqueológico Bou Ferrer es el único que se puede visitar en España bajo el agua y las visitas ofrecen la oportunidad única de contemplar una nave mercante con una eslora de más de 30 metros, que naufragó entre los años 64 y 68, y que transportaba más de 200 toneladas de mercancías entre ánforas de salsa de pescado y lingotes de plomo marcados con el sello del emperador Nerón.
Cultura de la Generalitat debe autorizar el buceo y solo lo puede realizar dentro del proyecto quien acredite que la práctica de buceo deportivo con las titulaciones exigidas. Se necesita reserva previa y siempre lo debe acompañar personal técnico que dirige la inmersión.
Las visitas se realizan los sábados y los domingos, si las condiciones meteorológicas lo permiten, del 4 de agosto al 30 de septiembre, en grupos de 10 buceadores. Se pueden tomar fotografías e imágenes de vídeo para uso personal, nunca con fines comerciales ni para difusión en medios de comunicación o redes sociales sin autorización explícita.
Durante la inmersión no se permite apoyarse, coger o manipular material arqueológico del pecio para evitar daños a las piezas y la pérdida o la alteración de datos científicos. No se puede tocar el casco de madera del barco ni las ánforas del cargamento, que son las mismas que están en Vilamuseu.
El año pasado la Unesco decidió incluir el yacimiento Bou Ferrer en el Registro de Buenas Prácticas de Salvaguardia de Patrimonio Cultural Subacuático por los excelentes trabajos de investigación del yacimiento y por las labores de divulgación.
Además, se valoró incluir como ejemplo de buenas prácticas las visitas que se pueden realizar en el yacimiento bajo la supervisión de especialistas en arqueología, la exhibición de las piezas excavadas en diferentes museos y exposiciones, así como la difusión del yacimiento en conferencias y congresos.
El pecio romano Bou Ferrer se encuentra naufragado a 25 metros de profundidad y a escasos 1.000 metros de la costa, frente a las playas de La Vila Joiosa. Las campañas de excavaciones han sacado a la superficie 230 ánforas de las más de 2.000 que transportaba el pecio, que también llevaba en la bodega lingotes de plomo con una carga de hasta 5 toneladas.