¿Cómo afectarán los problemas energéticos al teletrabajo?
Debido a la crisis de la covid-19 muchas empresas se vieron obligadas a adaptar su forma de trabajo y ofrecer a los empleados la posibilidad de trabajar desde casa. Esta solución aparentemente temporal llegó a modificar la organización de las compañías, sus políticas de contratación y ofreció una nueva forma de trabajo a los empleados. Si bien en países como España la medida más popular es la semi-presencialidad o formato híbrido (algunos días se trabaja desde casa y otros en la oficina) lo cierto es que, en los dos últimos años, se ha flexibilizado la presencialidad.
Según un estudio de la consultora Price Waterhouse, en 2021 el 42% de las compañías tenían previsto seguir trabajando en remoto de manera indefinida y un 40% ofrecer flexibilidad de manera permanente. Las ventajas del trabajo desde casa son numerosas: permiten el ahorro en transporte, se reducen los problemas de tráfico, pueden flexibilizarse los horarios laborales, puede facilitar el acceso al empleo a personas con diferentes capacidades físicas y en algunos casos simplifica la conciliación.
Sin embargo, también hay quien encuentra desventajas en este formato, relacionadas con el equilibrio entre la vida laboral y la personal, así como la sensación de aislamiento al no tener contacto en persona con los compañeros. Otro de los inconvenientes que aparece con más frecuencia en el último año es el impacto del teletrabajo en la factura de la luz.
La crisis energética que está atravesando Europa debido al veto a la producción rusa de la que depende el gas natural afecta al consumo del combustible y también a las políticas europeas relacionadas con el uso de gas y electricidad. Reino Unido, por ejemplo, ha impuesto un límite a las facturas de las empresas y en España se prevé una fuerte subida de los precios.
De acuerdo con El Economista, se estima que trabajar desde casa implica un coste de unos 90 euros al año. Uno de los hábitos que más afectan a este gasto energético es la elección de las franjas horarias, ya que hay ciertas horas del día en las que la luz es más barata e idealmente es el momento adecuado para trabajar online si queremos reducir el gasto. Es una variable que no siempre es fácil de controlar, ya que los horarios pueden variar, pero poner límites en este sentido se notará a final de mes.
Otra gran pregunta es cuáles son los dispositivos que más gastan. En este caso hay que tener en cuenta aparatos como la calefacción o el aire acondicionado, ya que es necesario crear una temperatura ambiente adecuada para poder trabajar. Por otro lado, los ordenadores portátiles consumen 0,05kWh, que se debe multiplicar por el precio del kilovatio hora y el tiempo que se haya utilizado el portátil. Además, dependiendo de qué otros dispositivos se utilizan y cómo se aprovecha la carga energética de cada uno de ellos, el gasto será diferente.
En cuanto a los dispositivos tecnológicos básicos que todo el mundo debería tener para cualquier situación, ExpressVPN ofrece un listado de dispositivos, cables y aparatos digitales que debes tener en cuenta si trabajas desde casa. Este kit de supervivencia tecnológico es especialmente útil para aquellos trabajadores en remoto que además viajan con frecuencia, como pueden ser los nómadas digitales. Si trabajar en remoto implica poder conectarse desde cualquier lugar, más vale estar preparado, y eso no debería significar un gasto excesivo para el bolsillo del trabajador.
En España, el plan de ahorro y gestión energética que se aprobó en agosto de este año incluye la recomendación de fomentar el teletrabajo, aunque solo como una recomendación y no con un plan específico. Además, la ley de teletrabajo de 2020 contempla que las empresas compensen al trabajador por los gastos generados; sin embargo, aún son medidas que se están implementando y hay quienes no han recibido esta compensación. Parece que en estos momentos de cambio, donde hay ventajas y desventajas, y hasta que el nuevo panorama quede claro, la mejor opción será vigilar los gastos y evaluar si el teletrabajo sale a cuenta.