La muestra ¡Pisa morena! recupera el retrato de Concha Piquer de Manuel Benedito en el Mubag
La directora general de Cultura, Marta Alonso, y la presidenta de la Diputación provincial de Alicante, Luisa Pastor, acompañadas por el director gerente del Consorcio de Museos de la Comunitat Valenciana, Felipe Garín, han inaugurado esta mañana la muestra '¡Pisa morena! Cuplé, copla y baile en época de Sorolla' en el Museo de Bellas Artes de Alicante.
La exposición enmarcada dentro de los actos conmemorativos del 150 Aniversario del nacimiento de Joaquín Sorolla plantea una genealogía de intérpretes femeninas de la canción ligera y de la copla en España, desde finales del siglo XIX a mediados del XX.
La exposición incluye el retrato de 'Concha Piquer' del pintor valenciano Manuel Benedito que fue adquirido recientemente por la Colección Banco Sabadell en una subasta, evitando que la pieza saliera de España. La institución Joaquín sorolla de Investigación y Estudios conocía de la existencia de la pieza de la que se conserva muy poca documentación y que no ha sido expuesta en la historia reciente del arte valenciano. El cuadro será depositado una vez finalice la exposición en el Museo de Bellas Artes de Valencia San Pío V.
La pieza se exhibe junto a otras dos obras maestras: el retrato de la famosa 'violetera', Raquel Meller, pintado por Joaquín Sorolla en 1928, y el de Pastora Imperio de José Villegas Cordero que data del año 1904.
A través de estas pinturas la exposición invita al espectador a aproximarse a las manifestaciones culturales más populares del entresiglos XIX-XX, área de investigación de la Institución Joaquín Sorolla.
Pastora Imperio, Raquel Meller y Concha Piquer revolucionaron el mundo del espectáculo con su maestría y singular personalidad. Eran admiradas internacionalmente por transformar y dignificar el baile, el cuplé y la copla. Respetadas por el público y los intelectuales de la época, fueron inmortalizadas por los principales artistas de sus correspondientes generaciones.
En 1918 a Joaquín Sorolla le faltaba solo un año para concluir el gran encargo de su vida, la decoración de la biblioteca de la Hispanic Society of America. En esta fecha Raquel Meller se disponía a conquistar los escenarios interpretando El relicario y La violetera. Sorolla materializó la admiración que profesaba por la artista en un bello retrato destinado inicialmente a la sociedad hispánica: una imagen de composición sencilla que inundó de color blanco.
Raquel Meller encontró un séquito de seguidores en los escritores y artistas afectos a las tertulias: Valle-Inclán, Julio Romero de Torres, Anselmo Miguel Nieto, Gustavo de Maeztu, los hermanos Machado o Jacinto Benavente, acudían tras el café a los principales teatros, donde actuaban La Fornarina, La bilbainita, La Argentinita o Pastora Imperio, de quienes se declaraban incondicionales. La maestría sobre el escenario de estas poderosas mujeres fue aclamada en infinidad de textos y su belleza inmortalizada por pintores y escultores que las convirtieron en iconos.
Pastora Imperio fascinó entre otros a José Villegas Cordero, Pérez de Ayala, Mariano Benlliure y Manuel Benedito; este último, formado en el taller madrileño de Sorolla, también retrató a Concha Piquer en 1926, recién llegada a España tras su éxito en Broadway. El torso erguido y la barbilla levantada provocan un gesto soberbio propio de la que recibiría años después el título de emperatriz de la copla.
Coincidiendo con la inauguración de la muestra esta tarde Felipe Garín ofrecerá la conferencia "Sorolla. Reflexiones sobre su 150 aniversario".
La exposición permanecerá en el Museo de Bellas Artes de Alicante hasta el 1 de septiembre y viajará al Centro del Carmen de Valencia hacia finales de año.