Conoce el Palacio de los Condes de Alpuente
Es por todos sabidos que la Calle Caballeros históricamente ha sido una de las calles más importantes de la ciudad, tanto en sus inicios como en siglos posteriores. Esta calle vio nacer Valencia y sobre ella se levantaron casas y palacios donde solo residían algunos afortunados.
Con el paso del tiempo, y sobre todo tras la Reconquista por Jaume I, la Calle Caballeros adquirió más categoría que nunca y solo la alta burguesía valenciana podía permitirse vivir en ella. Ilustres personajes residieron en sus palacios -hoy en día algunos privados y otros pertenecientes a la administración- que son fruto de admiración por locales y turistas y otorgando a esta calle un aspecto solemne y aristocrático.
El Palacio de los Condes de Alpuente, calle Caballeros nº 28
No es uno de los palacios más conocidos de la calle Caballeros pero no por ello es menos espectacular o está despojado de una historia interesante digna de conocer. Su fachada no es de las mejor conservadas, al menos en lo que a limpieza y luminosidad se refiere, pero este palacio es uno de los más llamativos del Barrio del Carmen.
De estilo barroco se levantó en 1700 sobre un anterior palacio gótico. Como podemos ver en la imagen que acompaña este artículo, su fachada es de ladrillo vista con balcones adilentados y protecciones de hierro, y consta de numerosos balcones que dan a la calle. En su interior podemos encontrar un semisótano, entresuelo, piso principal y segundo piso. También en su fachada nos encontramos con máscaras burlescas. Y otro balcón recae sobre su fachada en la calle Salinas.
¿Cuál es su historia?
Antes de ser el edificio barroco que conocemos hoy en día fue un edificio gótico que fue adquirido por una familia irlandesa, los Hollier reformándolo a principios del siglo XVIII en estilo barroco.
Una de las hijas, Isabel Hollier y Shelly contrajo matrimonio con José Carrión y Saenz de Juano y estos a su vez tuvieron una hija llamad Mariana Carrión Hollier casada en 1860 con Francisco Javier de Aspiroz y Montalvo, segoviano de procedencia y II conde de Alpuente por quien toma nombre el palacio.
A la muerte de estos, el Palacio de los Condes de Alpuente fue comprado por la pudiente familia Oller, quienes sustituyeron el escudo de la puerta por el de los Morales, que podemos ver el dintel de la portada.
Cabe recordar que este palacio, de los más grandes de la calle Caballeros, también fue sede de la Real Sociedad Económica de Amigos del País de Valencia y en la actualidad lo es de una empresa de ingeniería aunque con una importante reestructuración interior que modificó la decoración interior original del palacio aunque conservando en los techos de las escaleras las pinturas al fresco de inspiración clásica del pintor Julio Marcos Caparrós.