¿Quién era Zayyan ibn Mardanish? El hombre al que derrotó Jaume I
Nacido en Onda, Zayyán ibn Mardanish está considerado como el último rey musulmán de Valencia. Era descendiente de Muhámmad ibn Mardanix, nacido un siglo antes en Peñíscola y señor de Xarq al-Ándalus.
Xarq al-Ándalus eran las tierras más orientales de al-Ándalus, y que comprendía los territorios de la Comunitat Valenciana, el sur de Catalunya, Murcia e Islas Baleares. Ibn Mardanix fue además rey de Murcia hasta su muerte el año 1171.
Zayyan ibn Mardanish se convirtió en rey de València o Balansiya en 1229 cuando pudo eliminar del trono al almohade Zayd Abu Zayd y restaurar la Taifa de Valencia. Por su parte, Zayd huyó de la ciudad, llegó hasta la Corona de Aragón, se convirtió al cristianismo y juró lealtad al rey Jaime I convirtiéndose en su vasallo.
Zayyán mandó sus tropas en varias batallas durante la campaña de guerra contra Aragón, viviendo en Burriana y Puig algunas de sus derrotas más sonadas. De hecho, después de la batalla del Puig, Jaime I consiguió llegar a València en 1238, comenzando el asedio definitivo de la ciudad.
Zayyán, al verse rodeado por el gran ejército de hombres que había conseguido Jaume I, envió emisarios a muchos gobernantes musulmanes de Al-Ándalus y el Magreb. Sin embargo sólo la embajada, bajo la dirección de Ibn al-Abbar, ante el sultán hafsí de Ifriqiya, Abu Zakariya Yahya obtuvo respuesta. Enviando a València de una flota de 12 barcos que nada pudieron hacer para socorrer la ciudad del asedio de Jaume I por sus hombres. El numeroso grupo de aragoneses que le acompañaban había bloqueado el puerto de la ciudad.
Tras cinco meses de batalla, Zayyán asimilió que no había esperanza y fue entonces cuando empezó las negociaciones para la rendición perdiendo la ciudad en el otoño de 1238.
Entre esas negociaciones, se pactó la protección de los musulmanes que querían quedarse en la ciudad, y a permitir que se dejase partir a los que querían salir de la ciudad. También su propia salida y la de los suyos de tierras valencianas por el puerto de Cullera, hacia Túnez donde fallecería en 1270.