La boba y el gato rancio, el local gay de moda en Valencia
Puede parecer exagerada la afirmación y quizás hasta injusta respecto a otros locales de ocio LGTB de la ciudad, pero Valencia estaba coja de locales de este tipo hasta la llegada de La boba y el gato rancio, el local gay más de moda en la actualidad. Poco a poco y sin hacer ruido, se ha consolidado como una cafetería y bar de copas a tener en cuenta, donde pasar desde una tarde entre amigos a tomarse unas copas y empezar una noche de fiesta.
Situado en la calle Cuba, número 49 en pleno corazón del barrio de Ruzafa la bandera arcoíris de la fachada ya nos pone sobre aviso de la naturaleza de este establecimiento. Y quizás por ahí empieza el secreto de su éxito. No tiene miedo a ser etiquetado como bar gay, sin ser excluyente obviamente para cualquier tipo de público que lo visita. Pero no tiene complejos a salir del armario desde la misma fachada y esto, hoy en día, se agradece.
La boba y el gato rancio ha heredado un público que echaba de menos un local gay donde tomar algo de forma distendida como en su momento fue la cafetería de La Seu en el Barrio del Carmen. Y lo ha conseguido. Un local amplio, cómodo y de estética moderna incluso hasta sofisticada que se agradece. Sin estridencias, ni horteradas de por medio. Ese puntito con estilo que a veces falta en los locales LGTB y que aquí se agradece.
En la carta, puedes encontrar desde cualquier tipo de copas con especial atención a los potentes mojitos, muffins caseros, tartas caseras, leche merengadas, zumos y granizados a la vez que consultas su apartado de revistas, ves famosos videoclips e incluso puedes traer a tu mascota porque en La boba son muy amantes de los animales. De hecho su imagen es un perro de nombre Lola, que hace poquito cumplió 10 años. En La boba puedes traer tu mascota sin problema y como marca la ley, cada cierto tiempo cierran el local para higienizarse en este sentido.
Su terraza se llena durante todo el año aunque dentro se puede disfrutar de un ambiente climatizado que incluso se agradece en las noches más calurosas. En el poco tiempo que está abierto se ha trabajado una clientela fiel y buenas críticas en las principales páginas web de recomendaciones de viajes como es el caso de Tripadvisor. Locales como estos, sin prejuicios, hacen falta en la ciudad. Ah, y cómo no, la simpatía de sus propietarios es un plus que ayuda a volver, por supuesto.
