1878, el año en el que nació la Plaza de la Reina
Comunica otras dos grandes y emblemáticas plazas, la del Ayuntamiento y la de la Virgen. Este año la Plaza de la Reina ha cumplido 140 años y aunque no se haya programado nada especial para su conmemoración, desde Viu València queremos rendirle nuestro pequeño homenaje recordando sus inicios y cómo ha cambiado con el paso de los años hasta nuestros días.
Antes que nada cabe resolver una preguntar, ¿Plaza de la reina? ¿pero qué reina? ¿a qué reina homenajeamos los valencianos cada vez que nombramos esta plaza? En realidad su nombre es Plaza de la Reina María de las Mercedes, en honor a María de las Mercedes de Orleans, primera esposa del rey Alfonso XII. No se conocen motivos especiales por los cuales se eligió esta reina, era madrileña no valenciana, sino que así lo quiso el gobierno local de la época y dura hasta nuestros días.
La Plaza de la Reina antes se llamó Plaza de la Región valenciana durante tiempos de la República e incluso Plaza de Zaragoza. Debemos remontarnos hasta el año 1878 para comprobar el auténtico origen de esta popular y concurrida plaza de Valencia. Y es que por aquel entonces se buscaba en la ciudad un espacio de grandes dimensiones que pudiese ser considerado algo así como una especie de plaza mayor de Valencia así que el mismo día de la boda de la anteriormente mencionada María de las Mercedes con Alfonso XII (un 23 de enero de 1878), el Ayuntamiento de la ciudad empezó el derribo de las antiguas casas situadas delante de la Puerta de los Hierros de la Catedral (un espacio hoy ocupado por jardines y terrazas de los diferentes restaurantes) y del convento de Santa Tecla. Lo hizo el propio alcalde de la ciudad, el Marqués del Tremolar.
Pero la Plaza de la Reina seguía siendo pequeña y poco práctica y así durante muchas décadas posteriores se contemplaron varios re-diseños de la misma que nunca llegaron a efectuarse. Hasta que en 1944 empezaron más derribos de edificios adyacentes. Se sacó incluso un concurso público, el cual ganó Alberto Figuerola y en 1959 se instaló la primera fuente en la plaza. Los derribos continuaron hasta los años 60, donde finalizaron y ya en 1970 se llevó a cabo el parking subterráneo que hoy conocemos logrando así el aspecto actual que luce actualmente pero que tras medio siglo volverá a reinventarse de nuevo en fechas muy próximas.