La historia del número 4 de la Plaza de la Almoina, la Casa Puntdegantxo
Sede actual de diferentes viviendas, así como de las oficinas del Cinema Jove y otras sobre el Cambio Climático, el particular edificio del número 4 de la Plaza de la Almoina es más conocido como Casa de Puntdegantxo. Se trata de uno de los edificios más pintorescos y fotografiados del barrio de la SEU y obra del arquitecto Manuel Peris Ferrando.
De estilo modernista, se concibió como un edificio de viviendas construido sobre la capilla de San Valero levantada en 1719 y que quedaba integrada en su planta baja. Destaca la belleza de su fachada que recuerda a los textiles de ganchillo, por eso el nombre de Casa de Puntdegantxo.
Se compone por una planta baja y cuatro plantas altas y rematado el edificio por un hastial apuntado donde figura el año de su construcción: 1906 además de las iniciales A y S entrelazadas. Es curioso acercarse para entre la oscuridad la capilla levantada por orden del canónigo Jaime Servera con una puerta de estilo barroco. Sobre el dintel de la puerta podemos ver un óculo y por encima una hornacina con una imagen de San Valero fabricada por el escultor valenciano Rafael Orellano a finales del siglo XX.
La fachada de la Casa de Puntdegantxo tiene una decoración esgrafiada además de unas pilastras que imitan troncos y balcones de piedra de estilo modernista y otros realizados en forja de hierro. Además como curiosidad cabe destacar que sobre este mismo lugar estuvo la cárcel donde estuvo preso el obispo Valero antes de ser desterrado en un mismo enjuiciamiento donde San Vicente Mártir, martirizado en el siglo IV.
El interior de la capilla apenas tiene algún metro cuadrado de tamaño, es pequeñísima. Dispone de un altar y un retablo muy sencillo dedicado a San Valero. También inscripciones en latín de época indeterminada. Además el altar y el retablo proceden del desaparecido convento de Santa Catalina de Siena e instalados allí en 1970.