El antiguo trenet de Valencia cumple 140 años: así se creó
A mediados del siglo XIX, los sistemas de transporte públicos eran totalmente diferentes a los que conocemos en la actualidad. No había trenes AVE que conectaran Valencia con la capital de España en apenas 90 minutos, y se podían tardar horas y horas en hacer un trayecto que uniera Valencia con Castellón, algo que ahora podemos llevar a cabo en poco más de una hora.
Sin embargo para los valencianos y valencianas de la época, la aparición del trenet fue todo un boom, lo último en transporte y revolucionó sobremanera las relaciones personales y laborales en la provincia. La gente ya no tardaba muchísimas horas en ir a ver a sus familiares o depender de alguien que llevara coche para hacer depende de qué trayectos. Además el trenet facilitaba el traslado de un municipio a otro para poder trabajar. En 1877 llegaba el trenet y las comunicaciones en Valencia cambiaron para siempre.
La historia del trenet de Valencia
Los encargados de llevar a cabo los primeros pasos de este proyecto fueron la Sociedad Valenciana de Tranvías y la Sociedad de carbones minerales de Dos Aguas y del Ferrocarril del Grao de Valencia a Turis, que construyeron dos redes de ferrocarriles de vía estrecha. Las obras comenzaron el 3 de agosto de 1887 y supusieron un hito para la época ya que terminaron justo en el verano siguiente, en el de 1888. Valencia contaba por primera vez con una unión en tren con Liria, saliendo desde la estación central del trenet en Valencia, la situada en Pont de Fusta, hoy edificio de la Policía Local. Nada más ni nada menos que 26.800 kilómetros.
El trenet, el antecesor del actual Metro de Valencia, tuvo otra línea que se llamaba Del Grao de Valencia a Bétera con ramal a Rafelbunyol y que tuvo tres fases. Primero creándose una que conectaba la estación del Empalme en Burjasot con Bétera, luego otra del Puente de Madera con El Grao y por último otra que unía el Puente de Madera y Rafelbuñol. De hecho, hubo intentos de unir el Pont de Fusta con Sagunto pero 140 años después este proyecto aún no se ha llevado a cabo. A finales de 1800, el trenet continuó extendiéndose llegando hasta Torrente, más tarde se le unió Picassent, Carlet y Alberique para empezar el siglo XX con otra conexión, esta vez entre Alberique y Villanueva de Castellón.
Viejos vagones y poco cómodos pero que supieron un gran alivio para los valencianos. El trenet llegó a estar compuesto por cinco líneas gracias a 120 km de vías y hasta 69 estaciones, ¡casi nada!