'Esa cosa rosa', un oasis de color y naturaleza en la explanada del IVAM
El director del Institut Valencià d'Art Modern, José Miguel G. Cortés; los arquitectos Langarita & Navarro, y el artista Jerónimo Hagerman han presentado la instalación 'Esa cosa rosa', una intervención efímera que permanecerá todo el verano y que aportará sombra a la explanada del IVAM siguiendo criterios energéticos y ecológicos.
José Miguel G. Cortés ha explicado que "el colectivo Langarita & Navarro y el artista Jerónimo Hagerman han creado una especie de oasis en la explanada que reivindica lo accesorio, lo efímero, frente a la arquitectura permanente que representa el IVAM".
'Esa cosa rosa' ocupa una extensión de 340 m que la conforman 400 plantas naturales distribuidas en cuatro islas. Biorrollos compuestos de fibra de coco delimitan estas islas y las cubre una lona rosa que se eleva en altura sobre la fachada del edificio, y cuya forma rememora las hojas de las palmeras de este jardín improvisado, y así se funde con la instalación.
"Según nuestra teoría, podemos distinguir dos resistencias en la arquitectura: el 'busto' y el 'pellejo'. El 'busto' corresponde a la parte dura, pesada, inerte, de un edificio. El 'pellejo' se refiere a todo lo que es perecedero, orgánico, que se pudre o se pierde con el paso del tiempo, como las plantas. Nosotros reivindicamos esos tejidos blandos en la arquitectura", ha comentado María Langarita.
El arquitecto Víctor Navarro ha explicado que el objetivo del proyecto era "transformar un espacio público en un lugar más habitable". A través de elementos textiles y vegetales de gran escala, 'Esa cosa rosa' cambia la percepción de este espacio para convertirlo en una estancia exterior donde realizar actividades y reclama la importancia de esa parte "pelleja" que, aunque desaparece, es la que más recordamos de un lugar.
El título de la instalación alude al color rosa de las lonas, la tela 'spinnaker' utilizada en los barcos de vela deportivos, un material ignífugo que contribuye a generar una zona húmeda. El colectivo de artistas ha escogido el rosa "porque representa valores como la diversidad o la inclusión", según ha explicado Jerónimo Hagerman. "Desde el punto de vista óptico, el rosa se complementa a la perfección con el verde de las plantas y genera un gran contraste con la fachada del IVAM".
Tanto los artistas como el director han destacado la funcionalidad de esta intervención como un lugar en el que realizar actividades al aire libre, e invitan al público a "apropiarse de este espacio".
La instalación tiene un componente importante de sostenibilidad, ya que se ha realizado "utilizando plantas y tensando unas cuerdas con consumo 0 de energía", según han explicado. "El resultado es una intervención mínima, una pequeña transformación que, sin embargo, puede cambiar nuestra relación con los demás y con la ciudad", ha finalizado el director del IVAM.
La obra de Langarita & Navarro y el artista Jerónimo Hagerman forma parte de la línea IVAM produce, que promueve la creación de obras de distintos artistas y pone en valor proyectos 'site specific' para algunos espacios aparentemente no museísticos.