El Plano, el lugar ideal en Alicante para una escapada
Para viajar a El Plano, uno de los espacios naturales más accesibles y mejor conservados de la provincia de Alicante nos tenemos que trasladar al término municipal de Sax, en la comarca del Alt Vinalopó y a 44 kilómetros de la capital.
Al norte del casco urbano, los amantes de la naturaleza pueden disfrutar de El Plano, caracterizado por su aridez y salinidad con particularidades ecológicas propias. El Plano, es sin duda, un espacio natural en Alicante ideal una excursión de fin de semana.
La práctica totalidad de su superficie está formada por el pino carrasco, uno de los árboles más comunes de toda la Comunidad Valenciana y que debido a su adaptabilidad al entorno le hace sobrevivir al entorno incluso en las condiciones más difíciles.
Con más de medio siglo de vida, este gran pinar constituye una fotografía de gran belleza en esta reserva natural desconocida por el gran turismo pero donde disfrutar del silencio, el encanto y la tranquilidad que solo la naturaleza puede aportar al ser humano. Un viaje a El Palo, es una experiencia asequible, económica y que sorprende.
El Palo también está formado por otras especies como el albardín, el espino negro o la hierba jabonera. Y una rica diversidad donde encontrar una gran cantidad de especies animales empujadas gracias a la charca artificial creada en este entorno. Conejo, ardillas, erizos o zorros, algunos reptiles como el lagarto ocelado y aves como el jilguero, el verderón, la paloma torcaz, zorzales, cernícalos, etc… Lo que convierte a El Plano, en un espacio natural en Alicante ideal.
El Palo además cuenta con una zona de acampada controlada, aseos completos, zonas recreativas, kiosko y, cómo no, aparcamientos. La escalada y el senderismo son dos de las actividades físicas que más llaman la atención a los visitantes de esta reserva natural alicantina.
Pero El Palo no solo dispone de rutas naturales que explorar. También se pueden visitar lugares de interés como la colonia de Santa Eulalia, antigua colonia agrícola que data de finales del siglo XIX, recorrer la ruta arqueológica que conforman las poblaciones de Sax, Elda, Petrer, Aspe y Agost. O la ruta del Fondillón, conocido vino alicantino, que obliga visitar pueblos como La Algueña, Monóvar, Sax y Petrer.