El Círculo de Bellas Artes de Valencia, dinamizador de la cultura en Valencia desde 1894
Al no ser una entidad pública, sino privada, la pasada crisis económico afectó seriamente esta clásica institución dinamizadora de la cultura en la ciudad de Valencia. Tuvo que dejar su sede en un gran palacio de la calle cadirers, en plena Ciutat Vella, por otro más modesto, situado en el número 21 de la calle Maldonado, muy cerca de la Biblioteca de Valencia y la calle Guillem de Castro.
Pese a los inconvenientes, no solo económicos, sino sociales con un siglo XX convulso para España y el mundo, el Círculo de Bellas Artes de Valencia siempre ha defendido a capa y espada su leit motiv: ayudar a vida cultural y artística de la ciudad a través de múltiples actividades.
Creada por un grupo de artistas en 1893 en un local de la Calle Avellanas, su primer presidente fue el periodista y novelista Luis Domenech, aunque no fue hasta la llegada a cargo del pintor Joaquín Agrasot cuando el Círculo adquirió especial relevancia. Por él han pasado algunas de las personalidades culturales más importantes de Valencia como por ejemplo Joaquín Sorolla, que en 1912 creó el Grupo “Juventud Artística” al que pertenecieron los principales artistas del momento.
Una historia comprometida con nuestra cultura
La Guerra Civil marcó su primer gran punto de inflexión. Por razones ideológicas y en pro a la cultura muchos de sus cada vez más artistas asociados se integraron en la Alianza de Intelectuales en Defensa de la Cultura que tuvo un gran protagonismo como entidad cultural y artística durante los años de guerra.
Uno de sus grandes hitos fue la creación del Pabellón de la Segunda República Española de París en 1937 donde el 30% eran pintores, escultores, dibujantes y artistas falleros valencianos socios del Círculo de Bellas Artes de Valencia. Destacando nombres como Manuel Benedito, Antonio Muñoz Degraín, José Benlliure o Santiago Rusiñol. Sin embargo la Guerra Civil provocó su cierre hasta su reapertura en 1947 por el Marqués de Montortal.
Poco a poco el Círculo empieza a recuperar su renombre y también las obras, como por ejemplo la hija de Sorolla que donó una obra de su padre. Además se inició la recuperación del patrimonio que se encontraba salvaguardado y custodiado en el Museo de Cerámica, por Manuel González Martí a las que se iban sumando más y más obras de virtuosos del arte del momento.
Durante sus 125 años de existencia casi ininterrumpida el Círculo de Bellas Artes de Valencia, mucho más modesto que el de otras grandes capitales como el de Madrid, ha contribuido a darle a la cultura el espacio que se merece en Valencia con actividades, exposiciones, certámenes, publicaciones, recitales, conferencias, cursos, audiciones musicales… para artistas y el público en general. No solo acaparando la creación plástico si no toda expresión artística: música, literatura, arquitectura…
Si te interesa saber más sobre el Círculo de Bellas Artes de Valencia así como sobre sus exposiciones y actividades, entre ellas talleres y cursos, visita su web http://www.cbbaav.es