Mañana se cumplen 60 años de la gran nevada que cubrió València
En otras ciudades de España, esta noticia no lo sería: están acostumbrados a ver nevar sobre sus calles y tejados. El manto blanco es algo habitual en algunas capitales, incluso hay años que en el propio interior de València llega a nevar y cuajar pero no en la propia ciudad. Los habitantes se quedaron anonadados al ver la gran y última nevada que causó gran impacto en la ciudad.
Fue un 11 de enero de 1960, nevaba en media España y esta vez también le tocó a media España. De hecho podemos revisar las noticias que salían en los medios de la época, como Las Provincias, dónde destacaban que la nevada fue tan importante que llegó incluso al mar. Ha sido la última vez que la arena de la playa de Valencia ha visto la nieve.
Una gran nevada que comenzaría a las diez de la mañana y apenas dos horas más tarde ya sería intensa y copiosa, de hecho hasta incluso por la noche seguía nevando con lo que València no tardó en cubrirse de blanco. Era muy complicado conducir incluso por vías tan importantes como la calle Xátiva o la calle Colón, hubo tranvías que se salieron de los raíles, tiendas y colegios que decidieron cerrar y, cómo no, caídas de valencianos y valencianas nada acostumbrados a andar por su ciudad con este panorama. València incluso llegó a estar aislada tanto por carretera como por ferrocarril.
Aunque en los últimos años hemos visto “nevar” con copos que no llegan al suelo y se diluyen antes de tocar la acera, los efectos del cambio climático y el calentamiento global auguran que este fenómeno será aún más difícil que vuelva a sucederse en muchas ciudades de España y sobre todo en toda la franja litoral de la Comunidad Valenciana. Siempre quedarán las crónicas históricas y periodísticas que recuerdan otras grandes nevadas que tuvieron lugar en València en el siglo XIX como las de los años 1842, 1860 y 1885, donde se llegó a helar la Albufera. Otros años de nieves urbanas en la ciudad fueron 1600, 1543 y 1592.
En aquella gran nevada de 1960, muchos pueblos del interior quedaron aislados por completo y tardaron varios días ya no solo en disponer de tren si no también en poder disfrutar incluso de la radio al estar sin electricidad y es que los daños en los tendidos eléctricos y telefónicos fueron graves.
Una última curiosidad, como también recogió Las Provincias en su día, Todas las autoridades del cap i casal, es decir alcalde, gobernador civil y presidente de la Diputación, se encontraban en Madrid el día de esta nevada de 1960 porque iban a comunicar a la nieta de Franco, Carmen Martínez-Bordiú, que había sido elegida Fallera Mayor Infantil de Valencia
